92 años después (1680) de ver cómo la Gran Armada Española de 1588 se alejaba de sus costas empujada por los vientos hacia al Norte, los ingleses, que habían mantenido muy vivo el recuerdo del mayor peligro al que nunca fueron sometidos, editaron esta curiosa baraja.
A veces irónica, pero con datos de gran veracidad, esta baraja sirvió de entretenimiento y de propaganda para una sociedad que no quería dejar de engrandecer su ego rememorando cómo un día estuvieron a punto de ser españoles
En la baraja, por cierto, en ningún caso se nombra a la “Invincible Armada”, ya que como muchas veces hemos comentado, los ingleses prácticamente nunca la han llamado así, siendo “The Armada” o “Spanish Armada» los términos que utilizaron (y utilizan) para referirse a ella y, cabe destacar, a pesar de ser una herramienta de propaganda, el respeto que otorgan a nuestra Armada en mucha de sus leyendas y, como no, las mentiras flagrantes en otras de ellas.
Un documento muy interesante al que podéis echar un vistazo en este artículo.
Don Alfonso, duque de Medina Sidonia, capitán general de la Flota Española y Juan Martínez de Recalde, gran marino
La escuadra de Guipúzcoa, mandada por D. Miguel de Oquendo, compuesta de 14 navíos, y en ellos 2800 soldados, 807 marineros, 311 cañones, etc
La escuadra de Andalucía, mandada por D. Pedro Valdés, compuesta por 10 galeones y una pinaza y, en ellos, 2400 soldados, 800 marineros, 260 cañones, etc
La escuadra de Castilla, de la que era general Diego Flores de Valdés, compuesta de 14 galeones y 2 pinazas, llevando a bordo 2485 soldados, 1719 marineros y 384 cañones.
La escuadra de Vizcaya, mandada por D. Juan Martínez de Recalde, que se componía de 14 navíos, 2037 soldados, 863 marineros y 200 cañones
Los doce navíos españoles llamados Los 12 Apóstoles
La Armada Española, compuesta de 130 navíos, de los cuales 72 eran galeazas y galeones, donde iban 19290 soldados, 8350 marineros, 2080 galeotes y 2630 piezas de artillería. La fuerza naval se preparó durante 3 años enteros.
La flota inglesa, de la cual era Lord Almirante el Lord Charles Howard y Vicealmirante Sir Francis Drake.
El cuarto escuadrón regido por Forbister.
El tercer escuadrón dirigido por Hawkins.
El Papa consulta con sus cardenales y contribuye con un millón de oro a los gastos de la Armada.
El Almirante, Lord Sheffield, Sir Thomas Howard y otros se reúnen con Drake y Fenez contra la Armada de los Españoles y triunfan sobre ellos.
Los españoles reposan el ancla junto a Calais y el Almirante Inglés surge disparándoles un cañonazo, compuesta entonces la flota inglesa de 140 navíos.
Ocho brulotes enviados por el Almirante Inglés hacia la Escuadra Española en medio de la noche, bajo el mando de Young y Prowse.
Los españoles, a la vista de los brulotes, levan anclas, cortan cables y apelan a la fuga en medio de un ruido espantoso y gran confusión.
Los españoles deliberan y resuelven en definitiva volverse a España por el Océano Norte, habiendo quedado desaparejados muchos de ellos.
Barcos españoles perdidos en la costa de Escocia y 700 soldados y marineros arrojados a una playa.
Comandantes españoles hechos prisioneros y llevados a Inglaterra.
La Reina Isabel, con nobles, gentes distinguidas y gran multitud del pueblo dan gracias a Dios en la Catedral de San Pablo, puestas en lo alto las banderas tomadas a los españoles.
La Reina Isabel pasea, en triunfo por Londres, en una carroza tirada por dos caballos y todos los gremios la acompañan con sus estandartes.
El Príncipe de Parma, llegando a Dunkerke con su ejército, pero demasiado tarde, es recibido por los españoles con vituperios.
Varios jesuitas ahorcados por traición contra la Reina y por haber siso cómplices de la invasión
Bibliografía: Vida ejemplar y heroica de Miguel de Cervantes Saavedra. D. Luis Astrana Marín. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.